La corporación invirtió 88 millones de pesos en la readecuación, reparación y sustitución de los páneles solares que se encontraban en mal estado y no permitían el funcionamiento del sistema que fue instalado años atrás en la azotea del edificio, con el fin de bajar el consumo de energía.
Reducir el consumo de energía, ahorrar costos y ser respetuosos con el medio ambiente fueron las oportunidades que vio el ingeniero Héctor Correal, Gestor de Mantenimiento de Méderi, cuando a su ingreso a la corporación encontró páneles solares en la azotea del edificio.
El sistema que estaba instalado carecía de mantenimiento y fue necesario invertir en el arreglo pertinente, en las motobombas que llevan el agua hasta un tanque situado por encima del techo de la edificación, y en la instalación de nuevos sistemas de captación de luz.
“El tanque de agua tiene una capacidad de 100 mil litros. Gracias al calentamiento que proporciona la energía solar, el agua se mantiene a unos 60 grados centígrados de temperatura, y podemos proveer de agua caliente a los pacientes, que consumen diariamente unos 20 mil litros”, dice el ingeniero, quien manifiesta que además para ello el sistema se activa a las cuatro de la mañana y continua así hasta las diez de la mañana.
Al respecto, si el calentamiento se hiciera con diesel, el costo mensual sería de 25 millones de pesos, y si se hiciera con energía eléctrica el costo subiría a casi 35 millones. El impacto ambiental de esta medida consiste en que se produce sin ningún tipo de contaminación, es combustible limpio y el costo es cero.